Kremlin dijo el lunes que el presidente ruso, Vladimir Putin, había tomado la decisión de abstenerse de responder a nuevas sanciones de Estados Unidos del año pasado de manera independiente y que no había sido influenciado por el exasesor de seguridad nacional estadounidense Michael Flynn.
Flynn se declaró culpable el viernes de mentir al FBI sobre sus contactos con Rusia y acordó cooperar con los fiscales que investigan las acciones del círculo íntimo del presidente Donald Trump antes de asumir el poder.
Fiscales estadunidenses dijeron que Flynn y Sergei Kislyak, por entonces embajador ruso ante Estados Unidos, discutieron en diciembre pasado las sanciones económicas que la administración del expresidente Barack Obama había impuesto sobre Moscú por supuestamente interferir en la elección presidencial norteamericana, algo que Moscú niega.
En ese momento Obama expulsó a 35 diplomáticos rusos y autoridades estadunidenses allanaron dos complejos diplomáticos rusos en Estados Unidos.
Pero Putin dijo que esperaría para ver cómo se desarrollaban las relaciones con la nueva administración de Trump antes de responder. Rusia solo avanzó y tomó medidas de represalia este verano boreal.