Para Juan Carlos Osorio, técnico de la Selección Nacional, el partido contra Honduras, en la última jornada de la primera fase de las eliminatorias de la Concacaf, representa una oportunidad en dos sentidos.
“Para continuar fortaleciéndonos y, también, para ganarnos la confianza de nuestra afición. Honduras es un equipo atlético, que tiene fuerza para contraatacar. La idea es consolidar jugadores a futuro. Relajarse no es el caso ni lo fue contra Chile (en la Copa América Centenario). Las emociones paralizan la mente”, comenta.
Tras las bajas por lesión de Oribe Peralta, Javier Hernández y Raúl Jiménez, Osorio contempla a Martín Barragán y Ángel Sepúlveda como posibilidades en el ataque.
“Depende de cómo planteemos el partido, pero ellos dos son las opciones viables. Conocen esa posición”, agrega.
Sobre la posibilidad de realizar más cambios en el once titular, el estratega nacional explica que en la portería “Guillermo (Ochoa) tuvo la oportunidad y respondió”, mientras que Hirving Lozano podría entrar por Javier Aquino, quien salió con algunas molestias ante El Salvador.
“La idea era repetir a los mismos jugadores que contra Chile (0-7). Javier (Aquino) sufrió demasiados golpes. A pesar de eso, está muy animado. Tengo la tentación de protegerlo un poco. La palabra ‘Rotación’ tiene connotaciones negativas. Algunos la usan más que yo. Para mí son oportunidades”, indica.
Por último, aunque es cuestionado por la solicitud de Honduras de cambiar al árbitro Mark Geiger para este partido, Osorio se reserva sus comentarios.
“No estoy para hablar del técnico rival (Jorge Luis Pinto). Sus razones tendrá para hacer todas las sugerencias que hace”, concluye.
Entretanto, el zaguero Héctor Moreno descarta que exista temor de sufrir otro ‘Aztecazo’ ante los catrachos, como hace tres años.
“El ‘Aztecazo’ y el 7-0 es pasado. Hemos vivido de todo en estos tres años. Nadie se relaja, queremos ganar y llegar fuertes”, señala.